En esta nota, hablamos con Ramiro González, uno de los jóvenes músicos riojanos más prolíficos de los últimos tiempos.

Escribe Patricia Espeche – PUENTE ALADO                                                 1/10/15

Se autodefine como cantautor, “Más escritor que otra cosa”.

No se imaginaba que iba a ser músico. Tampoco que iba a escribir canciones.

Su padre, el “Pimpe” González le enseñó a tocar el charango cuando tenía 8 años. De adolescente, hacía covers de rock con amigos del barrio. Un amigo lo invitó a participar en el grupo vocal Horizonte iniciándolo en un viaje de ida. El Pica Juárez fue determinante en su carrera: “Me agarró como pupilo y me empezó a sacar por todos lados. Ahí conocí a un montón de músicos que luego se convirtieron en amigos”, nos cuenta mientras recuerda la causalidad de su ser.

Igual, su participación en las peñas de su padre con “La Rodadera”, lo foguearon en el oficio. “Es difícil de explicar. Lo que se aprende en un lugar donde se vive la música de manera natural no se puede aprender en otro lado”.

Empezó a escribir a los 15 años, “cuando mis amigos querían escribirle algo a alguna novia, yo les escribía para ellos”.

En junio del 95´escribió su primera canción de folclore: la zamba “Entre tu amor y mi amor”. Si bien la canción llegó al corazón de mucha gente cantada por Natalia Barrionuevo, Ramiro confiesa un poco de vergüenza por la inocencia de la letra.

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Como solista, ya editó dos discos. “Mojando la Vida”, grabado en el estudio de Luis Chazarreta en el 2002, recién pudo ver la luz en el 2009.

“El ojo de la Tormenta 1”, iba a ser un trabajo doble. Fue editado a través de la Ley del Disco y ya está en camino “Peñero”. Mientras tanto, se prepara para grabar en el 2016, la segunda parte de “El ojo de la Tormenta”.

Además, está grabando dos discos con otros artistas: uno con José Luis Aguirre, con quien formó “Amicho dúo” y otro con la agrupación “Riojanos”, la que integra junto al Pica Juárez, Emiliano Zerbini y Josho González.

Si todo sale bien, en diciembre tendrá cuatro discos nuevos.

“Es un gran esfuerzo grabar un disco. Los costos son muy altos y es muy complicado, sobre todo si no tenés herramientas como la ley del disco, uno de los grandes aciertos de La Rioja”. En ese sentido, remarca que la Ley del Disco, del Libro y la del Video son ejemplares y brindan la posibilidad de grabar sus trabajos a muchos músicos de la Provincia.

El autor de canciones como Los amanecidos, Vidala sobre vidala, Poquito, Bajo la Luna y el Sol no deja de proyectar: más discos, trabajos conjuntos con Ramón Navarro y un nuevo disco con artistas invitados de todo el país.

Te invitamos a ver la nota completa en video.

 

Edición de video Antonella Sánchez Maltese – PUENTE ALADO