Creación desde la tierra: La céramica de José Neris

Una parte de la extensión de tierra de nuestra provincia está compuesta por arcilla, por lo que no es extraño que en La Rioja varios ceramistas extraigan la materia prima con sus propias manos. Uno de ellos es José Neris, un comerciante de Chilecito que aprendió a dar forma a nuestra tierra creando piezas decorativas con llamativos colores, utilitarios y artesanías con diseños indígenas.

Escribe Camila Carbel – PUENTE ALADO


La cerámica se metió en la vida de José de repente, hace cinco años atrás, sin antecedentes familiares en este arte. Un día se enteró que se iba a dictar un taller de arcillas en Las Talas y decidió asistir recordando cómo de niño le gustaba jugar con barro, armando figuras.

En el taller, con docentes de distintas provincias, aprendió las técnicas de trabajo con arcilla y cómo recolectarla. Desde ese momento le dedica a la cerámica una parte importante de su tiempo.

Actualmente, José dice orgulloso que trabaja distintos tipos de arcillas en su variedad de colores y texturas, que recolecta él mismo en parajes cercanos a la ciudad de Chilecito. A su proyecto artístico lo bautizó como “Hombre de barro”.  

Sus primeros trabajos fueron ocarinas, un instrumento de viento típico del norte del país. Con la práctica fue ganando confianza e incursionó en otros productos, desde piezas figurativas decorativas, utilitarios y trabajos más regionales. “Con las ocarinas nació mi interés por continuar haciendo piezas de cerámica”, comentó.

Hacer la diferencia

Sobre su estilo, José señaló que busca salir del estereotipo de cerámica regional. “Voy por otro lado, con toques caricaturescos, más cartoon, para tener más variedad. Fue una sugerencia de mi hija que le gusta la ilustración y colabora con mi trabajo”. Aseguró que los resultados son positivos, porque las piezas tienen buena salida. “Se venden bien, a la gente le gusta mucho”.

Gran parte de la producción son piezas decorativas y utilitarios con colores bien llamativos, por ejemplo un gran jarrón de fondo blanco con dibujos del disco Yellow Submarine de los Beatles. Varios utilitarios orientados al público infantil que tienen como protagonistas a animales como tortugas, búhos y conejos. 

Entre su obra también se aprecían figuras humanas. Al respecto, José contó que son representaciones de personajes muy conocidos de Chilecito. “Algunos ya no están entre nosotros, pero mediante estas piezas busco recordarlos para siempre”.

“Este hombre que está con un hacha en su mano- dice Neris mientras alza una figura- es Enrique Morán, uno de los últimos descendientes de diaguita de Chilecito, que murió a las 103 años. Lo hice junto a su fiel perro Indio, que siempre lo acompañaba. Este hombre hachaba las tortas de leña para las panaderías, pero no le gustaban los billetes, quería que le paguen su trabajo con monedas y cuando le entregaban billetes se sentaba a llorar y su perro lloraba a su lado”, contó recordando que de niño presenció esa escena muchas veces.

Algunas piezas si son más regionales, como cuencos y jarrones con dibujos aborígenes tomados del libro “El diseño indígena argentino” de Alejandro Eduardo Fiadone. 

Como parte de su rutina de trabajo José cuenta que desde la recolección de la arcilla, el proceso de creación de la pieza, con su diseño y modelado, más la cocción y engobado o esmaltado, le demanda entre tres y cinco meses de elaboración. 

Algunas piezas las cocina a horno eléctrico o de gas, como ser los adornos que tienen líneas más finas. Mientras que las piezas más rústicas José las cocina en horno de barro a leña.

El artesano destacó las propuestas como las ferias y el Mercado de Industrias Creativas (MIC), para mostrar sus piezas y dar más visibilidad a las artesanías destacando la gran calidad y potencial que hay en la provincia.

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