Lugar de culto de las civilizaciones prehispánicas, importantes reservorios de agua dulce para la fauna y la flora, destino imperdible de millones de turistas. Pero qué son exactamente los miles de cenotes que se encuentran diseminados solo en la Península de Yucatán en México.
El nombre Cenote deriva del maya “dzonoot” que significa Caverna de agua. Son estanques de agua dulce y cristalina que se originan de ríos subterráneos. Por muchos años los cenotes fueron un misterio que poco a poco se fue develando.
Empecemos por el apocalipsis
Hace 66 millones de años cayó un meteorito que generó la extinción de los dinosaurios pero nunca se supo adónde había caído. Es necesario saber que el meteorito tenía el tamaño del monte Everest, que cayó a una velocidad 20 veces más rápido que una bala y con el impacto provocó un estruendo 920 millones de veces mayor que las bombas nucleares de Hiroshima y Nagasaki. Las consecuencias fueron olas tsunamis por doquier, la temperatura ascendió a 500 grados y a causa de la explosión el aire estuvo lleno de polvo y cenizas por meses bloqueando la luz solar. Esta falta de sol sumada a la lluvia ácida, provocó el enfriamiento del planeta que derivó en la extinción masiva de especies.
Pero no fue hasta recién en los 70 que se descubrió bajo el mar caribe mexicano el cráter de 200 km de diámetro del meteorito al que bautizaron como Chicxulub, palabra de origen maya que significa Pozo del Diablo.
¿Cómo se crearon?
Como resultado del impacto del meteorito se formaron agujeros, explosiones que dieron una red de sumideros que son los cenotes, estas maravillas naturales únicas en el mundo, sólo existen en esa parte de México. Éstos también tuvieron su transformación a través de millones de años. Gota a gota se crearon columnas enormes de estalactitas y estalagmitas en su interior, distintas formaciones geológicas imponentes, raíces de árboles que descienden desde la superficie y una fauna de peces e insectos que sólo existe en esa oscuridad.
Hay distintos tipos de cenotes según su edad:
- Los de cielo abierto son los más antiguos, no tienen cúpula que ya se cayó por el paso del tiempo y lucen como piscinas naturales.
- Hay semiabiertos se ven partes de caverna y partes sin techo.
- Los subterráneos, son los más jóvenes y mantienen la bóveda cerrada, hay algunos a los que se accede a través de un pequeño agujero en la tierra y otros en los que hay que atravesar caminando cientos de metros de cavernas oscuras para acceder a ellos.
Cenotes sagrados para el hombre de todos los tiempos
Para los mayas, los cenotes eran muy valiosos como fuentes de agua dulce pero además los relacionaban con el misticismo, para ellos eran también lugares sagrados como un puente para comunicarse con otro mundo. También era el sitio donde realizaban sacrificios y distintos rituales, en el Cenote Sagrado de Chichén Itzá se descubrieron, además de joyas, piedras preciosas y otras ofrendas, los huesos humanos de jóvenes y niños menores de 11 años.
Hay variadas actividades que se pueden realizar en los cenotes además de bañarse. Es posible bucear, hacer snorkel, paddle surf, rappel, entre otras. Se cree que hay muchos cenotes escondidos de los que no se sabe nada, se calcula que entre los estados de Quintana Roo y Yucatán, existen más de 15.000.
Hasta hace poco se descubrió que están conectados entre sí, que tienen salida al mar y en misiones de buzos espeleólogos se encontraron restos humanos de la era de hielo y restos de animales ya extintos como tigres dientes de sable, elefantes, camellos, osos perezosos de 2 toneladas y demás megafauna del pleistoceno.
Ahora sabemos que el impacto del meteorito que acabó con los dinosaurios fue el que dio origen a los cenotes. Los mismos que surgieron hace millones de años y fueron testigos del paso del tiempo y de la evolución de nuestro planeta. Estaban cuando no existía el hombre y probablemente estén cuando dejemos de existir, el cómo nos sobrevivan los cenotes, dependerá del cuidado que le dé el hombre de hoy.