El majestuoso paisaje al pié del Famatina

En el empalme de Capayán (RN40 y RN78), y con la impactante postal del Famatina, se ingresa serpenteando de sur a norte la Sierra de Paimán hacia “Plaza Vieja”. Por entre casonas, chacras y viñedos, se llegará a Famatina (fundada en 1592), cabecera del departamento y centro de míticas resistencias ancestrales y contemporáneas.

Escribe Poly Badoul – PUENTE ALADO


No muy lejos, espera al visitante un cúmulo de sorpresas: fincas abiertas al público para conocer las faenas campestres del nogal, la pera y la manzana, principales cultivos del lugar. Un lindo museo arqueológico, el Cristo articulado en la iglesia de San Pedro, la plaza principal, representan el clásico paseo.

Adentrándose en callejones, contrastan gredas amarillas con follajes tupidos de nogales y álamos, así como construcciones de barro y piedra, acequias y aguas color ocre. A la “Cueva de las Brujas” se llega desde el generador hidráulico de energía eléctrica de los años 50. Guarda historias de socavones insertos en un vallecito incrustado por sedimentos rojos, amarillos, blancos, que dan el mágico contexto a míticas leyendas y los fantásticos personajes.

Uno de los sitios tan poco conocidos como impactantes está a 35 km de la cabecera departamental, centro de creencia popular: el Niño de Gualco. Desde la RN78 se abre una vista increíble de “Angulos” con el fondo del Cerro Chaschuil, donde la sucesión de estratos ocres rojizos, azules, durazno y verdes, contrastan con límpidos cielos matinales del vallecito ignoto.

Santo Domingo, en el norte riojano guarda es una población oculta en un bolsón, pequeño reducto jesuítico, que mantiene al adobe como protagonista de viviendas, entre pequeñas fincas casi sin delimitaciones. En su plaza se yergue un nogal tricentenario.

Muy cerca de allí está Campanas con su iglesia de San José (MHN) y Museo Acnin, pequeño pero con muestras de todos los periodos arqueológicos de la región.

Continúa hacia el norte y se llega hasta El Potrerillo, reducto rural alrededor de una montañita colorada y es límite con Catamarca. Disfrutar los encantos de Famalilao y su aguada o los cerros de Santa Cruz,  otros de los tantos distritos encantadores.

Siempre por asfalto, está Chañarmuyo que encubre al sitio arqueológico “La Parrilla”, bases de un caserío de cultura Aguada en la falda de la montaña, con hermosas vistas hacia los viñedos y el dique.

Las frutas más dulces son las de Pituil, destacando a los vinos artesanales (pateros), duraznos, dulces y toda manufactura de familias ancestrales, donde se regresa a la RN40.

Este derrotero se inserta en una región importantísima de La Rioja centrada entre Talampaya y el Pucará de Los Sauces, siguiendo caminos totalmente asfaltados, muy accesibles y en el eje de la Ruta 40. No debe dejar de visitarse.


Viernes 12 de Enero de 2018